De puro hielo, de puro duro.

(Codornices y matrices pescadoras mueren lento en la flor de batis.
Las raíces cubren arena de mujeres garza,
Costera marea de crecimiento y tallo tipo estolón,
lenta y bellísima percusión de tiempo mojado.
Cabezas de gato espumeando de sales flota cuerpos.
Hormigas irritándome la cara con sus patas puntiagudas,
Se me hinchan las manos como cubiertos de plata,
como manteles de mujerzuela barata.
Y tú con mujer parada en la orilla del satélite lunar y puntiagudo de Sonora. Con las greñas manchadas de amarillo (rayos de pigmento para ser exacta).
Hiérvete en inciensos de la peste aviar, Trabaja para santos degollados por la santa verdad.
Lombrices de cara boca abajo que comen polvorones de manzana te seduzcan con constante ajetreo y ridiculez).
¿Porque? Por rápido y mentiroso, por desesperado como siempre, sin virtud de la paciencia; ahora ya no quiero nada. Por otra parte he decidido la lejanía del recuerdo y tratar de hacer el mínimo velorio a estas consecuencias.
El ahora es puro pasado punteado de infinitos para adentro.
Adiós quien sabe que.
Pues ya no se que fuiste y eres.